El baño era algo pequeño, pero eso no fue un problema para nosotros. La verdad es que nos recordó a los baños de los aviones, ¡pero mucho más limpio y cómodo! Fue divertido tener una experiencia tan única en el hotel. Además, la playa Marbadás estaba tan cerca que parecía que teníamos nuestro propio acceso privado a la playa. ¡Qué lujo!

La cama era algo pequeña para nuestro gusto y el sofá resultó ser bastante incómodo. Sin embargo, eso no arruinó nuestra estancia y pudimos disfrutar de todas las demás comodidades del hotel.

Ubicación perfecta, anfitriona amable, casa bien equipada, tranquilidad absoluta.

Todo estupendo.

La verdad es que cualquier pequeña incomodidad se disculpa porque el conjunto es muy acogedor. Por poner alguna pega, en la ducha, al ser estrechita se te pegan un poco las cortinas al cuerpo, aunque enseguida le pillas el truco, quizás iría bien una mampara. Lo mejor es que la propietaria estuvo atenta en todo momento y fue muy amable. Además, la ubicación del hotel es muy tranquila, lo cual permite desconectar bastante bien. nos dejaron unas fresas y todo para el desayuno, lo cual fue un bonito detalle.

La ducha es pequeña y se siente un poco incómoda ya que las cortinas se pegan al cuerpo. Sería mejor si tuviera una mampara.

La anfitriona Olivia es un amor, siempre pendiente de nuestro bienestar. La casa está muy bien ubicada, al lado del restaurante de la Cofradía de pescadores. Fácil aparcamiento. Casa cómoda y bien equipada.

Me sentí como si estuviera en casa, no me puedo quejar.

Mi estancia en este hotel fue fantástica! El valor por el dinero fue excelente y la habitación era muy cómoda. La ubicación era perfecta, justo al lado del restaurante de la Cofradía de Pescadores, y a solo dos minutos del hermoso paseo marítimo de Rinlo. El personal, especialmente Olivia, fue increíblemente amable y atento, asegurándose de que nos sintiéramos como en casa. Incluso nos dejó pequeños detalles como un cartón de leche en la nevera y un delicioso bizcocho casero. Sin duda, recomendaría este alojamiento a todo el mundo.

La habitación en Casa Fonte Da Pena fue una pasada! Tenía dos baños con ducha y lavadora, perfectos para nuestra familia. Además, había dos baños con secador de pelo, lo cual fue genial. Nos sentimos como en casa.

Quizás, lo único que no nos convenció fue que había poca iluminación en la habitación. Pero esto es solo nuestra opinión ¡a otros huéspedes les podría gustar!

La ubicación de la casa es perfecta, situada en un pueblo tranquilo con fácil acceso al hermoso paseo marítimo. Es posible aparcar cerca del alojamiento, lo que facilita la llegada y salida. Además, la casa está equipada con todo lo necesario para una estancia cómoda, desde productos de baño hasta utensilios de cocina.

Aunque la ducha es pequeña, se puede encontrar una solución rápida para evitar que las cortinas se peguen al cuerpo.